LOGROÑO – SANTO
DOMINGO DE LA CALZADA Kmts. 46
Día 15-6-94. Salgo de Logroño a las 7 de la mañana, he traído una fotografía, que el año pasado nos hicimos, el grupo de peregrinos e Ignacio Landaluce, para entregársela personalmente y así saludarle, pero como es muy temprano y no aparece por su chamizo hasta más tarde, he decidido entregársela en un sobre al encargado de la gasolinera, donde Ignacio pasa a diario, para que le haga entrega en mi nombre.
En una postal que Gonzalo y Mariló me remitieron desde Burgos, me decían que Ignacio había recibido la fotografía y se acordaba perfectamente de todos nosotros, también que me enviaba afectuosos saludos. Al paso por Navarrete he tenido una larga charla con el párroco, José Félix, joven del Opus, con el que he tenido oportunidad de discutir de cuestiones terrenales diversas. Como tengo la intención de visitar el Monasterio de Santa María la Real de Nájera, cosa que no pudo ser el año anterior, apuro el paso y llegar antes de que lo cierren al mediodía. Unos 5 kmts. antes de llegar a Nájera, adelanto a tres abuelitas austríacas, muy simpáticas, con quienes tengo ocasión de charlar un ratito. Llego a Nájera y chasco, son las 12,35 y el monasterio lo cierran a las 12,30. Ruego que me lo dejen visitar, nada que hacer, no hay guía, si quiero tengo que esperar a las 4 de la tarde que lo abrirán de nuevo. Llega Margarita, una ciclista belga y le ocurre lo mismo, a esperar a las 4. Decido esperar y visitarlo, no voy a dejar pasar esta segunda oportunidad, así que descansaré plácidamente a la orilla del río Najerilla, en la terraza de un bar, donde comeré a la sombra, fresquito y agradable, haciendo tiempo.
A las 4 en punto estoy a la puerta del Monasterio, las abuelitas austríacas también hacen cola, además de un grupo de excursionistas alemanes. La espera mereció la pena, el grupo de alemanes andaba por un lado con su guía y yo por mi cuenta haciendo la visita a placer, media hora muy bien aprovechada, a un lugar con mucha belleza e historia. A las 4,30 retomo el camino hacia Santo Domingo, con breve parada en Azofra para visitar a Evaristo, un paisano que la vez anterior nos invitó amablemente a un vaso de vino y una simpática charla. El pobre Evaristo, me cuenta, estuvo a punto de morir hace unos meses, muy enfermo, ahora se está recuperando, le deseo mejore su salud y espero verle la próxima vez que haga el Camino. Llego en solitario a Santo Domingo de la Calzada a las 8,30, ha sido una jornada bastante dura, me aposento en el Albergue, que por cierto está muy bien acondicionado.
Ducha,
cambio de ropa y a visitar la Catedral, que según me dicen, han retirado el retablo
y han aparecido unas columnas románicas preciosas. El retablo
fue realizado en el año 1.580, por lo tanto ha estado durante
400 años tapando las columnas románicas, que así se
han mantenido intactas. En el Albergue me dicen que la Maclein durmió ayer
aquí, he leído su recuerdo en el libro de honor. Después
de cenar he mantenido una larga charla con Margarita,
la ciclista belga y otra chica irlandesa, sobre el Camino de Santiago. |