ESPEJO – SALCEDO Km 25,1

Día 20-04-07. De nuevo me sorprende la espléndida mañana que amanece, el sol comienza a lucir sobre el cielo azul y el calor volverá a ser la tónica, igual que los cuatro días anteriores. Ayer por la tarde me vinieron a visitar mis amigos Carlos, Conchi y Enrique con los que pasé un rato muy agradable, entretenidos charlando y cenando en un pueblecito cercano, nos pasaron las horas sin sentir, total que a las 11 caí en la cama rendido.

Tuesta


Juan Carlos, el dueño de la Casa Rural El Molino, me tiene preparado el desayuno justo a las 8, así que, después de hacer cuentas, parecerme algo caro el precio pagado, a las 8h30m salgo a continuar el itinerario del GR1 que hoy daré por finalizado, por ahora.
Retorno de nuevo a cruzar Espejo para, a través de una solitaria carretera, llegar al pueblo de Tuesta. Según tomo altura y vuelvo la vista atrás, contemplo la escarpada sierra que hay al sur de Espejo, Peña del Mazo, que hace de separación del Valle del Río Ebro.
En poco rato llego al pueblo de Tuesta con una magnífica iglesia, según parece de origen templario de arquitectura de transición del románico al gótico. Abandono Tuesta siguiendo pistas agrícolas en constante sube y baja para llegar al pueblo de Salinas de Añana, que bien merece capitulo aparte.

Salinas de Añana


En primer lugar me sorprenden algunas edificaciones importantes con escudos heráldicos y sólida arquitectura medieval. En la plaza se realizan aún antiguos actos tradicionales en determinadas fechas con motivo de celebraciones religiosas y civiles. La importancia y poder de la villa proceden de la explotación y comercialización desde muy antiguo, de la sal, mineral de vital importancia en la antigüedad.
El Valle Salado, así denominado por el cauce por donde fluye el agua con fuerte contenido salino. Este cauce es canalizado hacia depósitos o eras, sustentados por postes de madera muy resistente a la corrosión. Estas eras conforman una especie de terrazas y depósitos debajo de estas plataformas donde se recoge la sal. Una serie de canales distribuyen la sal muera hacia cada uno de los depósitos con un orden establecido desde fechas muy antiguas. Es todo un conglomerado que, actualmente, está muy deteriorado debido a su abandono como explotación industrial y en desuso hoy día, aunque según puedo comprobar, se pretende recuperar como memoria histórica de una actividad vital en época antigua y no tan antigua.

Lago de Caicedo


A partir de Salinas de Añana el itinerario del GR1 transcurre pro pistas y caminos para irse acercando al Lago de Arreo o de Caicedo, puedo escuchar el sonido de las aves acuáticas y ranas, aunque no pueda ver realmente la propia laguna pues el espeso bosque de carrasca me lo impide, al fin a través de los árboles puedo tener una ligera visión, muy parcial, de las aguas. Una alambrada impide el acercamiento al borde del lago, por tanto he de dar un amplio rodeo hasta que finalmente la senda llega al mismo borde de los carrizos y juncos en la parte menos profunda. El agua es dulce pues el pequeño manantial salino no permite la salinización muy elevada del agua. Es un bonito entorno adornado por los cultivos de cereales, bosque de carrasca y el carrizal-juncal. Alrededor de las aguas las aves anidan y se protegen en los carrizales, aún así puedo escuchar muy de cerca sus sonidos y movimientos.
Abandono la zona lacustre por el Arroyo del Lago que es el desagüe natural de la laguna y que seguiré hasta el pueblo de Fontecha. Es una senda bastante salvaje aunque perfectamente señalizada en los troncos de los árboles, no hay pérdida posible.

Fontecha


Sobre las 12 del mediodía, a la fresca sombra de un quejigo, hago una ligera parada, mis pies piden aire acondicionado, así que me planto las venteadas sandalias y esto es otra cosa. Antes me he asegurado de que el itinerario no sigue por el monte, una víbora podría darme un buen susto.
Al salir a una zona de sembrados, una cierva que se alimentaba de los ricos y tiernos brotes, sale disparada dando saltos como alma que lleva el diablo.

Fontecha-Torre de los Condestables


En un recodo doy vista a la soberbia torre defensiva en bastante buen estado de conservación, voy llegando a Fontecha. Otra torre de similar arquitectura, algo más moderna, se halla en las afueras del pueblo. Las torres dan cuenta del estratégico lugar donde se ubica Fontecha, el control del tráfico salinero y el paso del Río Ebro por Puentelarrá a poca distancia.

Salcedo


Mi itinerario toma ahora un camino, a veces empedrado, por el valle del Arroyo Caicedo en ascenso hacia el pueblo de Caicedo de Yuso donde llego en cuestión de 30 minutos. No resisto la tentación de mojarme los pies en la fresca agua de la fuente, tengo los pies algo embarrados y así aprovecho para refrescarlos, la temperatura es sofocante.
Por una pista asfaltada entro en el pueblo de Leciñana del Camino y desde lo alto veo con nitidez el estrecho paso de Pancorbo, Toloño y las sierras que cierran el Cañón del Ebro, Sierra de Oña y la Sierra de Arcena (Montes Obarenes), entre estas dos sierras se halla del Valle de Tobalina.
Salgo de Leciñana del Camino en dirección a Salcedo teniendo a la vista Miranda de Ebro, el camino por el que debería transitar el GR1 ha sido invadido por los sembrados, por tanto he de caminar campo a través de dichos sembrados hasta empalmar con su continuación, es decir el camino real, y dando vista y a corta distancia de Salcedo donde entro a las 14h35m.
Una gran tormenta se está conformando en la distancia por lo que no sería extraño que al final me mojara.
Como quiera que aquí en Salcedo termino esta primera parte del GR1 y tengo billete para el autobús de las 18h15m en Miranda de Ebro, tomo la carretera a allí se dirige, pero como digo, la oscura tormenta que se avecina me obliga a llamar un taxi a toda prisa para que venga a recoger. Cuando llega ya comienzan a caer gotas gordísimas, por esta carretera no circula ningún vehículo, por eso no me ha quedado mas remedio que llamar al taxi que me transporta hasta las cercanías del sitio donde el bus hace la parada. El taxista me recomienda comer en el Restaurante Duque de Frías, así que me acomodo para tranquilamente pasar el tiempo que me resta para el bus, buen menú, buen descanso y a las 11 de la noche en casita de nuevo.
Datos del GPS: Distancia recorrida 25,1 km. Tiempo en movimiento 5h20m. Tiempo detenido 49m. Tiempo total empleado 6h9m. Media total 4,1 k/h. Desnivel acumulado 491 m.

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