LASCUARRE – GRAUS 25,7k

Día 27-03-2013. De madrugada me he despertado oyendo el ruido de la lluvia al caer en la calle, la pereza me invade a las 7h30m, me imagino empapado entre las brumas de la mañana y no digamos andando por los embarrados caminos, qué martirio me espera.

Iglesia de Lascuarre


Un opíparo desayuno nos entretiene a las 8 mientras vemos caer la lluvia a través de la ventana de cristal, dan ganas de volverse a la cama de no ser por tener que cumplir el infalible programa establecido para la jornada de hoy.
Ramón, el taxista de Graus, se presenta puntual a las 8h30m para descendernos hasta el pueblo de Lascuarre donde me despido de mis amigos John Hayes y su esposa Christine quienes seguirán el itinerario del GR1 hacia Catalunya y el Mediterráneo con mucho ánimo e ilusión. Yo seguiré también el GR1 pero en dirección contraria hasta Graus con el fin de tomar el bus de las 16h15m con destino Huesca para a continuación seguir viaje en el AVE a Madrid donde espero llegar antes de las 22h a casa de nuevo.
Así pues en Lascuarre me despido de mis amigos para acercarme al taller de mi amigo Gilbert a saludarle y al mismo tiempo despedirme hasta mejor ocasión. Pertrechado para la lluvia, a las 9h, intento localizar las balizas roja y blanca del GR1 y seguirlas hacia Graus, tarea algo complicada pues tanto las balizas como los indicadores brillan por su ausencia, finalmente mi GPS me ayuda a salir del embrollo teniendo que cruzar el Barranco del Oliviadre con abundante caudal y barro en sus alrededores.

Lascuarre-Vado del Barranco


Persiste la ligera llovizna que no llegará a mayores pero que me obligará a ir protegido a pesar de la buena temperatura que hace. Comienzo a probar la envenenada medicina que me amargará todo el itinerario, el maldito barro mezclado con tierra arcillosa que se pega a la suela de mis botas añadiendo un par de kilos a cada una pareciendo por momentos que llevo puestas unas raquetas de hierro en mis pies, me desequilibran pues elevan mi estatura en casi 8 centímetros, un verdadero tormento.

Ermita Virgen de´l Pla


En un cruce de caminos me encuentro con un poste indicador de “Ruta Hípica” y las balizas roja y blanca pero ninguna referencia al GR1, estas indicaciones giran hacia el sur pero mi GPS me dice que al oeste, total que pierdo contacto con las indicaciones siguiendo por el lado del profundo Barranco de la Ribera sin poder cruzarlo puesto que mi camino sigue por el otro lado de la barrancada y no es cosa de volver atrás, total que desemboco en la carretera por la que circulo unos 2 kilómetros hasta tomar otro camino que me lleva al pueblo de Laguarrés a cuya entrada está la bonita Ermita de la Virgen de´l Pla con un cementerio a su lado.
A las 10h40m entro en el pueblo de Laguarrés con barro hasta en las orejas, he de esperar el paso de un enorme rebaño de ovejas que atiende una señora. Parece que quiere salir el sol pero será una vana ilusión pasajera, no obstante ya no llueve y la temperatura es elevada. Cruzo las cuatro casas de Pociello donde un par de avestruces se asustan al verme, están en un corral alambrado.

Capella-Puente medieval sobre el Isábena


Sigo por los campos de la Baja Ribagorza y Tierras de Graus cruzando sembrados de cereales por cuyos caminos embarrados los tractores han destrozado sus asientos provocando grandes balsas de agua y barro complicando mi caminata.

Camino de Graus


Desciendo al borde del Río Isábena que baja con tremenda fuerza, sus aguas rugen atronadoras con el bonito color turquesa. Doy vista al bonito pueblo de Capella llegando al lado de su puente románico sobre el río con varios ojos, el central muy elevado sobre el cauce principal del Río Isábena, lo contemplo desde todos los ángulos, bajo al cauce del río para apreciar las enormes dimensiones del ojo principal. Un matrimonio con un chico joven contemplan también esta joya arquitectónica, con ellos charlo un rato, luego me los encontraré de nuevo en Graus pues han tomado buena nota de mi comentario sobre el Hotel restaurante Lleida.

Graus-Basílica Virgen de la Peña


Abandono Capella a las 12h30m prosiguiendo el itinerario que al ver la distancia que el indicador de la carretera marca hasta Graus, 4 k, me digo “vas muy deprisa y llegarás demasiado pronto”, craso error pues la distancia real que me queda serán al menos 8k con fortísimo desnivel incluido, por supuesto con barro hasta las rodillas.
Comienzo el ascenso entre caminos y tierras de labor hacia Portaspana, un antiguo caserío, ubicado en un tozal y que formaba parte de las fortificaciones de la Ribagorza, ahora en completa ruina, al cruzarlo paso al lado de paredes a punto de derribarse por lo que apuro el paso. En el ascenso empapo la camiseta y he de desprenderme del chubasquero que ya está empapado por dentro.
Inicio un largo descenso por un camino también embarrado alrededor de la sierra teniendo a la vista, en la distancia, Graus. Voy dando alcance a un caminante, se trata de Igor que ha salido a darse un paseo a pesar de la amenazadora lluvia.

Graus-Puente sobre el Ésera


He de añadir que las motos tienen destrozados los senderos pues las roderas hacen de conducción de las aguas deteriorando completamente las sendas, una verdadera salvajada.
Junto a Igor desciendo en agradable charla hasta cruzar el Río Ésera por un bonito puente antiguo y llegar a Graus cuando el reloj marca las 14h30m.
Datos del GPS: Distancia recorrida 25,7k. Tiempo en movimiento 5h10m. Tiempo detenido 30m. Tiempo total empleado 5h40m. Media en movimiento 5k/h. Media total 4,5 k/h. Ascenso acumulado 328m. Descenso acumulado 526m.

PERFIL DE LA JORNADA