PINETA – GRANJAS
DE VIADÓS Kmts. 37
Día 21-7-97. He dormido estupendamente, ningún ruido, todo ha sido quietud y tranquilidad; la tienda se ha secado completamente. Me levanto a las 6:30, pero tardo en prepararlo todo, aproveché el minibar para enfriar la leche y la cantimplora, así que hacia las 7:15 salía del Parador dispuesto a disfrutar de una nueva jornada que se presenta espléndida en cuanto al clima; el sol comienza a iluminar las cumbres.
La senda llega a un plano llamado La Larri con bonitos prados, enfrente hacia el norte, aparece otro circo a los pies de un enorme pico llamado La Munia. A veces el sol se cubre con una bruma, pero aun así ilumina todos los alrededores. Tengo también enfrente la vertical pared por donde bajé ayer, impresionante, parece increíble que por allí se pueda bajar. Una vez he ascendido a los 2.000 mts. de altura puedo contemplar los glaciares de la cara norte del Monte Perdido, Balcón de Pineta, el caminito por donde se asciende y los desagües en imponentes cascadas del lago en la ladera norte del Perdido, realmente impresionante. Las marmotas me van dando la “ Bienvenida “, algunas incluso se atreven a dejarme acercar. Hacia los 2.090 mts. hay un pequeño collado y a continuación una depresión cuyo fondo está cubierto por una verde pradera, toda esta zona son praderíos donde las vacas pastan tranquilamente.
Cuatro chicos de Castellón se desperezan y comienzan a recoger las cosas. Ya en la Collada Pietramula a 2.150 mts. tengo enfrente otro circo, es la sierra de Liena; un grupo de unos 10 excursionistas comienza el ascenso hacia dicho circo, todos en “fila india”, luego vería una furgoneta francesa. El descenso hacia el Río Real lo hago muy rápido; ya abajo me cruzo con un señor y tres señoras mayores franceses que se dirigen a Pineta. Tomo una pista que desciende a Chisagües primero y luego a Parzan, esta pista fue construida para subir a unas viejas minas. Enfrente, en la otra ladera, un camino muy bien trazado discurre casi en línea recta, no parece transitado pero tiene todo el aspecto de ser muy antiguo. Las cumbres de Cotiella están algo cubiertas, poco antes de llegar al caserío de Chisagües aparece la estilizada Peña Suelza y su macizo. En Chisagües un grupo de chavales sentados en la carretera con sus mochilas, que van sacando de una furgoneta, cuando va a arrancar para bajar a Parzan vacía, le pregunto al chico que la conduce si me baja, por supuesto. Son un par de kilómetros, una media hora, que me evita bajar por dicha carretera; me he tirado 6 kmts. por la pista, ya me quedaba dormido, qué aburrimiento.
Al lado de la gasolinera, esta carretera viene de Bielsa, a 9 kmts. está la frontera francesa, nada más cruzar el túnel, de tal forma que hay bastante tráfico; como digo, al lado de la gasolinera hay un bar, me tomo una cerveza y pregunto a la joven si es muy pronto para comer, son las 12. Tienen un menú de 1.000 pts.; me dice que en un ratito estará la comida. Mientras me tomo una cerveza en la terraza, saco el teléfono y a trabajar un poco. A las 12:30 la comida está en la mesa, buen plato de lentejas y buen trozo de cordero, postre, café y a la 1:15 salgo de nuevo a la senda, los cuatro chicos de Castellón llegan en este momento, me despido y continúo, ahora durante 1´5 kmts. por la carretera bajo un intenso calor. Un indicador a la derecha “Urdiceto a 11 kmts.”. Por pista en continuo ascenso, insisto, bajo un calor ya sofocante. Bajo la sombra de un pino, a las 2 horas y media hago una parada, tomo el teléfono y a trabajar otra vez. Continuo sudando por los cuatro costados; cuando llevo caminados 7 kmts. aparece una furgoneta francesa, no me lo pienso, pido ayuda para subir. Dos abuelitos y el nieto en una vieja Renault acondicionada hasta para dormir, suben al Ibón de Urdiceto, me recogen, algo más adelante en una torrentera la furgoneta se queda atravesada, nos bajamos un abuelo y yo, a empujar se ha dicho. Salimos adelante, pasamos por la Central a 1.900 mts.; luego el Paso de los Caballos, lugar en el que yo debería bajarme, pero continúo con ellos hasta el Ibón que está unos 50 mts. más alto. Está represado, en la falda norte de Punta Suelza, muchos neveros, las cumbres son de más de 2.900 mts. Me despido de mis nuevos amigos y desciendo al Collado o Paso de los Caballos. Buenas perspectivas del Macizo de Eriste y del Posets.
Comienzo
el descenso hacia Viadós;
son las 4:00 y como la guía marca 2 horas y media hasta las Granjas
de Viadós, me lo tomo con toda la calma del mundo,
hago fotos, bebo agua de todos los torrentes, disfruto todo lo que
puedo. Esta zona es
muy bonita, todo muy verde y con muchos pinos. Me cruzo con dos grupos
de chavales que suben a Urdiceto fatigados y preguntando
cuanto falta para llegar. En el Collado “Las Collás” hago
una breve parada, pero las moscas están insoportables, me obligan a
continuar. Cada vez tengo más cerca el Macizo del Posets,
grandes neveros en su ladera noroeste. Éste es el Valle de Gistaín,
unos kmts. más abajo San Juan de Plan, famoso
por las caravanas de mujeres para los solteros hace ya algún tiempo. Al tomar
contacto con la pista que sube de San Juan varios
letreros con la foto del joven de 14 años que desapareció en esta zona
el año pasado; los carteles piden la colaboración de los excursionistas
y montañeros por si encuentran algún rastro, también como
advertencia de peligro. Varios campamentos con chavales, es una enorme explanada
verde con muchos árboles. Este punto, donde se unen el Cinqueta
de Añes Cruces con el Cinqueta de la Pez,
dos ríos que circulan por los barrancos del mismo nombre, siendo divididos
por el Macizo de Bachimala, se llama Bordas del Forcallo,
donde también hay un camping. Son las 7:00, tomo habitación en
una especie de Refugio muy nuevo y muy barato; ahora me dispongo a cenar y
a dormir. Hoy he adelantado más de tres horas sobre lo que tenía
programado; por tanto he de recomponer el plan de mañana y pasado. Mientras
cenaba, siendo las 9:00, se conforma una tormenta con fuerte lluvia en las
alturas, malos presagios. |