PONT
DE SALLENQUES – PUENTE CORONAS KMTS. 10
Día 20-9-97. Por problemas de logística, éstas dos etapas las he tenido que hacer de Este a Oeste. Después de pasar toda la noche en el tren y una larga espera, de 4 horas en Lérida, hasta la salida del autobús, éste me ha dejado en el kmt. 148 de la carretera al Valle de Arán, un poco antes de llegar a la entrada del Túnel. Este punto es el encuentro del Río Sallenques con el Río Ribagorzana, lugar de inicio de dos jornadas, mejor dicho medias jornadas, para concluir definitivamente la Senda Pirenaica GR11. Comienzo el fortísimo ascenso del barranco siendo las 11,30 de la mañana, con un día bastante bueno, el sol calienta mucho, de momento el cielo está despejado, luego será otra cosa. Al poco rato de caminar por una bonita senda entre un bosque de pino y hayas, me cruzo con dos paisanos, bastante mayores, que regresan de coger setas, no ha sido una mañana muy productiva.
Poco a poco la senda se va inclinando, se nota que está pisada, supongo que en verano, los campamentos que se organizan algo más arriba, tendrán esta parte entre sus itinerarios. Hay algunas zonas arrasadas por las avalanchas, son laderas muy inclinadas, el río se precipita en largas cascadas. A pesar de costarme mucho esfuerzo, tanto el ascenso, como la zona transitada entre el bosque, lo ha sido a través de agradable sombra. En menos de 4 kmts. tengo que ganar un desnivel de 800 mts., por tanto un enorme desgaste, empapo toda la ropa, hasta los pantalones, me cae el sudor por la cara, cuello, todo húmedo. A medida que gano altura, aparecen a mi espalda los Besiberri, un macizo que se une a Conanglós y el Circo de Colomers. También comienzan a aparecer nubes de evolución por la parte de las Maladetas.
Hacia los 1.700 mts. de altura, abandono Sallenques y giro a la izquierda para comenzar a remontar el Barranco de Riu Güeno, que se desprende desde lo alto en diversas cascadas. Al cabo de 1,30 horas arribo a un plano con varios ibones, es el Circo de Anglós, una serie de ibones y un cordal que lo separa del circo gemelo de Llauset, por la derecha otro cordal, Molás de Anglós, que hace de separación del de Sallenques. Hay un pequeño refugio de madera para 4 personas, puede servir para una emergencia. Dos barras altas y metálicas con colores pintados que supongo son para señalar la altura de la nieve y así controlar la afluencia de agua a los diversos torrentes.
Es este un lugar muy agradable y tranquilo, el GR se bifurca, a la izquierda, hacia el sur con un fuerte ascenso al cordal, para bajar luego al Ibón de Llauset. Yo sigo hacia el oeste por una pronunciada canal pedregosa bordeando varios ibones. Oigo gente hablando, tres personas bajan por los cortados de la derecha, van hacia el refugio, no nos cruzaremos. Se va cerrando todo con unas nubes oscuras muy sospechosas, de pronto se pone a pintear, el panorama cambia radicalmente. En todo caso hace viento y a veces clarea. Con mucho esfuerzo, tratando de ir deprisa, llego a la Colladeta de Riu Güeno, desde donde tengo buenas perspectivas del Pico Ballibierna, Cap de Llauset, todo el Circo de Llauset con sus bonitos ibones, el conjunto lacustre que acabo de abandonar y la Collada Ballibierna, punto cumbre cuya ascensión iniciaré a continuación. Dejo la mochila en la collada y subo a hacer unas fotos, se pone a llover de nuevo. Abajo en el Ibón Cap de Llauset llega una pareja y se paran a comer.
Ahora tengo que descender a dicho ibón, es una bajada muy inclinada, de unos 200 mts. La pareja que come al lado del ibón, es un chico y una chica franceses, están congelados de frío, no nos entendemos muy bien, así que me paro diez minutos a comer algo. Son las 2,30, la lluvia sigue cayendo suavemente, a veces chispea queriendo ser nieve, la verdad el sudor se queda muy frío, tenían razón los franceses. Sigo para ascender al collado, en el inicio me cruzo con otros dos franceses que bajan, a veces clarea y hasta sale el sol. Más adelante, en plena canal, tres chicos catalanes bajan del Collado Ballibierna, ya lo tengo al alcance de la mano. Son 2.750 mts. de altura, el panorama impresiona.
Por la derecha los contrafuertes del Aneto, imponentes espinazos, abajo todo el Circo de Ballibierna con sus ibones, enfrente el Macizo del Posets entre nubes, es lo que más escondido está. A la izquierda el Pico Ballibierna y su escarpado cordal. Como ha salido el sol, dejo la mochila en el collado y asciendo a un pico que está unos 100 mts. más alto para tener mejores perspectivas. Las vistas magníficas, la tormenta se ha desplazado hacia el Sur-Este, se oyen los truenos. Bajo de nuevo al collado y aparece un joven checo, lo primero que me pide es tabaco, el pobre estaba con el mono, no aguantaba más sin fumar. Inicio el descenso, ahora con muchas precauciones, las piedras están algo húmedas y resbaladizas, hay mucha inclinación, es realmente peligroso. Una vez que he descendido a los Lagos de Ballibierna, como voy muy bien de tiempo, me paro varias veces a disfrutar de la tarde, ha despejado y está muy bien de temperatura. Las marmotas han clareado la piel, en verano eran más pardas, ahora color crema, supongo que se preparan para el invierno. Sigo viendo las escarpadas espaldas del Aneto y la cara norte del Ballibierna, con sus dibujos en forma de culebras, muy bonitos. El Macizo del Posets no logra aparecer con claridad.
Continuo
el descenso, distingo desde lo alto la zona de bosque donde está mi destino de hoy, el Puente
Coronas. Por la derecha veo perfectamente el Circo
de Llosás, imagino los hoyos donde se asientan
sus ibones y cerrándolo por arriba el Pico y Brecha de las
Tempestades. Hacia las 6,30 llego al Puente Coronas,
zona de acampada, muchos coches y gente, decido montar
la tienda aquí para
pasar la noche. Hacia las 8, ya cansado y con mucho sueño, me
meto en el saco y a dormir calentito. |