22 PK200-E90 – BOHONAL DE IBOR 37K

Día 23-02-2020. A las 7h30m, cuando ya hay suficiente claridad como para salir a la ruta, abandono el Hostal Portugal en el PK200 de la E90 donde he dormido estupendamente bien, ya desayunado y preparado para afrontar esta última jornada por Extremadura a través del GR113 Camino Natural del Tajo que me llevará hasta el pueblo de Bohonal de Ibor donde terminé el domingo pasado. Cruzo las dos rotondas sobre la autovía sin peligro alguno puesto que no hay nada de tráfico a estas horas tan tempranas en un domingo con el cielo azul radiante y una temperatura de 4 grados, contemplo que por debajo de los 300m de nivel en todo el cauce del Tajo hay espesas nieblas, afortunadamente por encima de ese nivel todo está claro con el sol iniciando su diario nacimiento por el este.

Puente de Albalat


Tomo la antigua carretera N-V que inicia el descenso hacia el cauce del Río Tajo, a los pocos metros el GR113 sigue la Cañada Real del Puerto de Miravete apartándose momentáneamente del asfalto descendiendo directamente hacia el Puente de Albalat de impresionante fortaleza y sobriedad, fue construido en el siglo XVI por orden del Emperador Carlos I, durante la Guerra de la Independencia fue destruida una parte por el ejército nacional para evitar el paso del Ejército Francés que había establecido dos puntos defensivos a ambos lados del cauce del Tajo, el de la derecha en la zona elevada denominada El Fuerte cuyo nombre era Fort Ragusa, el de la margen izquierda en el Cerro del Tesoro al que llamaron Fort Napoleón. La destrucción por el ejército nacional fue realizada con ciertas prisas y debido a la fortaleza y firmeza de la estructura del puente, al ser volado perecieron 30 combatientes nacionales. Lo contemplo desde varios ángulos comprobando la magnitud de la obra de ingeniería.

Cruce de la Finca el Gato


A lo lejos escucho el ruido que supongo emana de la Central Nuclear, penetro de lleno, a través del Camino de Almaraz a Higuera de Albalat cruzando la verja metálica de entrada a la enorme Finca el Gato, dejo a la izquierda la Fuente del Gato y algo más adelante, a corta distancia, las instalaciones ganaderas y la casa de la finca donde un perro algo fiero viene hacia mi ladrando con cierta agresividad, le enseño el bastón hasta que sale una persona de la casa llamándolo a la calma, le saludo en la distancia. Continúo por el camino entre los terrenos adehesados muy verdes entre encinas ahora que el sol ilumina con fuerza todo alrededor. Contemplo a cierta distancia el Puerto de Miravete con varias antenas en la cima del Cerro Miravete (839m) en la sierra del mismo nombre.

Cauce de la Garganta de Descuernacabras


Escucho el ruido de una máquina que despacio avanza por el camino que sigo, se trata de una especie de tractor con un remonte, al llegar a mi altura se detiene para saludarme, se trata de Eliseo la persona que me saludó desde la casa cuando el perro furioso venía hacia mí, Eliseo tiene ganas de charla y curiosidad por el caminante madrugador, pregunta si voy a Guadalupe, le doy las explicaciones pertinentes de mi itinerario a continuación, me indica que saldré de la gran finca antes de llegar a Higuera y luego volveré penetrar en la misma puesto que mi objetivo es llegar a la Garganta de Descuernacabras (vaya nombre), por tanto al ser conocedor Eliseo de toda la zona me indica que tendré algunos problemas para arribar a dicha garganta por ser un lugar escarpado y sin camino alguno para llegar.

Garganta de Descuernacabras


Me despido de Eliseo que se dirige a cuidar del ganado que tiene en un gran cobertizo cercano, sigo por el camino hasta llegar al pueblo de Higuera de Albalat, por la derecha, en lo alto, la Sierra de la Caldilla con escarpados canchales pizarrosos en su ladera norte a la vista. Nada más entrar en Higuera, son las 9h35m, tomo a la izquierda un camino entre paredes de pizarra y cercados con pastizales hasta penetrar nuevamente en la gran Finca el Gato cruzando los encinares hasta llegar a otra gran finca llamada El Rozal cuya alambrada voy dejando a mi izquierda y que me servirá de orientación. He de indicar que desde Higuera no he vuelto a ver balizas ni mojones del GR113, por tanto me guiaré con el GPS que cumplirá su función con verdadera precisión.

Cauce del Río Tajo


Desde los 450m de altura de la dehesa he de descender a la depresión del Río Tajo a 250m de altura así que inicio el descenso monte a través puesto que la alambrada que seguía ya no existe y no hay referencia alguna salvo la depresión de la Garganta de Descuernacabras que ya contemplo su parte más elevada imaginando la inclinación que deberé salvar al bajar. Recupero mis experiencias montañeras y poco a poco voy contemplando lo que me espera al llegar al cauce de la garganta viendo lo imposible que será cruzarlo puesto que es el retroceso del agua del embalse del Tajo, por tanto habré de subir garganta arriba y localizar un lugar de cruce adecuado sin que sea a nado, la garganta se retuerce y no veo punto de cruce hasta escuchar el sonido del agua sobre las piedras, aquí sí que podré cruzar.

Valdecañas de Tajo


Pero el agua es abundante y extendida sobre piedras rodantes así que descalzo imposible, al agua patos, con las botas puestas y el agua hasta los tobillos cruzo sin miramientos, mis pies reciben con gusto el agua fresca, se secarán rápido puesto que la temperatura sigue en ascenso. Un fuerte y elevado repecho me permite llegar hasta un camino que va siguiendo el cauce de la garganta convirtiéndose en estrecho sendero a medida que me voy acercando al cauce del Río Tajo donde desemboca la Garganta de Descuernacabras, al dar el giro al estrecho cauce de la garganta me topo con un coche en un plano donde finaliza una pista que viene del pueblo de Valdecañas de Tajo, el dueño está sentado al lado del agua caña en mano, le saludo y enseguida sube a entablar una agradable charla. Emilio, que así se llama el pescador, comparte conmigo interesantes experiencias viajeras y vivencias profesionales por lo que la charla resulta muy formativa y agradable.

Presa de Valdecañas


Pero este senderista tiene que llegar antes de las 17h a su destino en el pueblo de Bohonal de Ibor para tomar el bus a Madrid y no puedo de ninguna manera salvar este compromiso así que me despido de Emilio que dejo entretenido en su placentero y descansado deporte para continuar por la pista en continuo ascenso hasta llegar al pueblo de Valdecañas de Tajo cuando el reloj marca las 11h50m, aún me restan 17,2k hasta Bohonal de Ibor ahora que el sol calienta con fuerza. Vuelvo a tener referencia de las balizas y mojones del GR113 que desde Higuera de Albalat no había vuelto a ver por ningún lado, este tramo sin un GPS podría resultar complicado realizarlo sin balizas.

Embalse de Valdecañas


Comienzo esta otra mitad de la etapa subiendo por rampas muy inclinadas al igual que el descenso a continuación, varios buitres revolotean sobre la depresión del Arroyo de la Sierra al que he de descender hasta el Puente de Gorrilla donde enlazo con una pista que viene del Poblado de Valdemoreno por debajo de la Presa del Embalse de Valdecañas, al dar vista a la presa en una curva de la pista hay una gran casa en ruinas, según parece fue el lugar de la dirección de la obra en su construcción ahora arruinada con vistas a la formidable presa. La pista que sigo bordea el gran embalse desde lo alto con bonitas panorámicas del agua contenida y que ahora está algo baja de su nivel normal.

Mesas de Ibor


Sigo por la pista sin tráfico alguno entre jarales, encinares y retamares en la más absoluta soledad, se me hacen algo pesados estos 7k por la pista que perece no tener fin pues después de llegar a un punto en la distancia recta nuevamente hay otra recta interminable, por la derecha la Sierra de la Hache y Sierra Gallega a corta distancia. Afortunadamente una fresca brisa sopla amortiguando el calor de la mediodía hasta entrar en Mesas de Ibor, pequeño pueblo donde no hay cobertura telefónica, son las 13h55m, varios viejos alcornoques adornan los alrededores del pueblo, en la plaza un rollo o piedra de ajusticiados adorna el centro ajardinado. Estoy en la Comarca de los Ibores cuyo centro neurálgico es la depresión del Río Ibor cuyo cauce atravesaré en pocos minutos.

Puente medieval sobre el Ibor


Abandono Mesas de Ibor por camino que a los pocos metros comienza el suave descenso hacia la gran depresión del Río Ibor, la ruta sigue muy cercana a la carretera y lo que fue la Cañada de San Román, cruza el asfalto en varias ocasiones en el descenso cada vez más inclinado, la senda ha sido recientemente acondicionada con avisos a los conductores cada vez que la senda cruza la carretera, en el tramo final aprovecha la antigua carretera que muestra el estrecho y complicado viejo itinerario hasta dar vista al nuevo puente con tirantes en el punto denominado Puente de las Veredas, realmente son tres puentes casi solapados entre ellos, el nuevo más elevado, el antiguo bajo este último construido y el más viejo de origen medieval algo separado y estrecho a cuyo lado aún permanece un viejo molino hidráulico.

Puente medieval y molino en el Río Ibor


En el estrechamiento del cauce, lleno de marmitas de granito donde se remansan las aguas además de enormes bloques que interrumpen el cauce es donde se construyeron los puentes, el que más me llama la atención es el más antiguo, de un solo arco asentado sobre los salientes de granito, bajo pisando las rocas lisas hasta cruzarlo y descender hasta el mismo cauce del río en un bonito entorno de árboles y aguas transparentes que saltan sobre base rocosa, desde aquí abajo puedo contemplar en toda su dimensión el precioso puente medieval, una verdadera joya, la pena es que ha perdido la balaustrada de piedra ahora sustituida por una de hierro que le da un aire diría que “perverso”.
Sigo la ruta por la Cañada de San Román en ascenso cercano a la carretera nueva hasta dar vista al pueblo de Bohonal de Ibor mi destino de hoy al que llego cuando el reloj marca las 15h45m. Me acerco a la plaza y en el bar Los Arcos de los Nava saludo a Victor quien me prepara unos huevos rotos que devoro en un pispás, me llego a la parada del bus de SAMAR donde a las 17h10m me aposento cómodamente hasta llegar a casa en Madrid.
Datos del GPS: Distancia recorrida 37k. Tiempo en movimiento 7h15m. Tiempo detenido 51m. Tiempo total empleado 8h6m. Media en movimiento 5,1 k/h. Media total 4,6 k/h. Ascenso acumulado 763m. Descenso acumulado 715m.

PERFIL DE LA JORNADA