01 TAMADUSTE – FRONTERA 25,4K

Día 7-06-2021. Iberia me traslada a Tenerife, aquí un vuelo de Binter me lleva a El Hierro cuyo aeropuerto no admite naves grandes por la corta dimensión de la pista de despegue y aterrizaje solo apta para aviones pequeños como los turbohélice que vuela Binter así que a las 13h desembarco en el pequeño aeropuerto de El Hierro comenzando de inmediato la ruta prevista por el GR131 Camino Nat. de El Hierro.

Tamaduste


La ruta bordea el aeropuerto por zonas planas volcánicas por el llamado Cangrejo hasta dar vista al pueblo de Tamaduste ubicado en una pequeña bahía donde algunos bañistas nadan en las limpias aguas de color verde-azulado, son aguas muy tranquilas puesto que el cierre de la bahía no permite la entrada de las olas, el color de las casas es de un blanco resplandeciente a pesar de que el día está algo nublado o brumoso con una temperatura de unos 22 grados, el sol no saldrá para calentar el ambiente, de inmediato he de comenzar un duro ascenso empapando la ropa de sudor.

Tamaduste y aeropuerto


No he adquirido líquido vital así que ya comenzando el ascenso, de la última casa aparece una señora en la puerta al sentir mi presencia, le ruego me de un vaso de fresca agua, más adelante llenaré la cantimplora puesto que pasaré por varios pueblos. Tomo rápidamente contacto con las balizas roja y blanca del GR131 además de una amarilla del PR-EH 6 Camino del Norte que me acompañará en un largo tramo, la senda está empedrada en su inclinado inicio, luego el picón, arenas volcánicas, me complicarán el ascenso puesto que el pie se me desplaza unos centímetros hacia atrás.

Camino del Norte


Sopla una ligera y fresca brisa que suaviza el esfuerzo al subir las laderas de la Montaña del Tesoro y la Montaña Hoya del Diano camino del pueblo de Echedo, supero algunas zonas de cultivo de vides a muy pequeña escala, llaman mi atención unas curiosas flores silvestres que llaman sanjoras de varios tipos y colores además de variado tipo de arbustos tropicales, me desplazo por laderas al nivel de los 380m teniendo a la vista la cercana costa por mi derecha y por la izquierda las inclinadas laderas de los conos volcánicos.

Camino de Echedo


A medida que avanzo rodeando esta zona nordeste de la isla se van ampliando las áreas cultivadas con más vides, frutales e higueras. Desemboca la senda en una pista asfaltada donde dos obreros trabajan en una pequeña finca, me saludan amistosamente. Las casas están construidas con materiales volcánicos, paredes de piedras negras sin tejados puesto que por aquí no es que llueva con mucha frecuencia, estas paredes no destacan mucho del ambiente volcánico. Al desembarcar del avión de Binter las azafatas me entregaron una chocolatina que ahora calmará los leones de mi estómago que ya están protestando.

El Golfo


A las 14h40m entro en el pueblo de Echedo donde se ubica el bonito restaurante La Higuera de Abuela donde entro a adquirir una botella grande de agua mineral bien fría, está lleno de comensales en un ambiente relajado y agradable en un patio sombreado de palmeras y otras especies y con mucho colorido, un lugar muy recomendable, como la ruta es bastante larga y aún me queda mucho camino que andar, no me puedo permitir el lujo de comer en mesa y mantel, en otra ocasión será, de momento con la cantimplora térmica y el 1,5l de fresca agua complementada con Tang y azúcar mi cuerpo resistirá lo que haga falta.

Sonjoras


Ahora voy mucho más tranquilo y más contento que unas castañuelas por un camino a la izquierda de la carretera HI-152, algo más atrás otra carretera descendía hacia un lugar recomendado, Las Calcosas, unas piscinas naturales al lado del mar que según parece son muy visitadas por bañistas. Las inclinadas rampas de la senda empedrada, estas antiguas vías de comunicación entre pueblos eran caminos de herradura puestoq eu no había otros medios de transporte. Bordeando chumberas el sendero entra en el pueblo de Mocanal (mocán es un árbol autóctono de Canarias), cuando el reloj marca las 15h15m, 3 aburridos paisanos sentados a la sombra de una casa, les pregunto si lloverá puesto que el ambiente se oscurece, así me enrollo un rato, la verdad es que finalmente algo lloverá cuando llegue a mi destino en Frontera, los paisanos dicen que de lluvia nada.

Mirador de Jinama


Sobrepasado el pueblo de Erese que dejo a mi izquierda, entro en Guarazoca pasando por la puerta de la panadería donde anuncian la venta de quesadillas típicas de la isla y otros dulces artesanos recién salidos del horno, compro dos quesadillas y una cajita de mantecados, una quesadilla la ventilo de tres bocados aunque es muy consistente y rica, otro buen alivio para mis leones. Sigo ascendiendo de nivel por caminos entre paredes de rocas volcánicas, ya casi a 700m de altura llego al Mirador de la Peña sobre los elevados y verticales cortados que rodean El Golfo, hay una pequeña ermita con una diminuta imagen de la virgen, un antiguo sendero muy inclinado sobre los altos cortados permitía el descenso, ahora se ha prohibido su paso por el peligro de desprendimientos, me asomo e impresiona la verticalidad.

Comienzo del Camino de Jinama


Vuelvo a la senda para continuar ascendiendo hasta conectar con una pista asfaltada (HI-120) durante un largo trayecto, hacia los 1.200m de altura el panorama alrededor cambia radicalmente, hay algunos pinos en un amplio plano denominado Hoya de la Vaca donde precisamente un rebaño de vacas pasta en una gran finca. Me hallo muy cerca del pueblo de San Andrés que dejo a mi izquierda rodeado de varios conos volcánicos.

Camino de Jinama


A las 18h llego al Mirador de Jinama a 1.250m de altura donde se ha construido un moderno mirador que vuela sobre el vertical cortado, aún no está accesible por ser de reciente construcción sobre el anterior desde se puede tener una de las perspectivas más interesantes de la isla, el conjunto de El Golfo, los pueblos y las explotaciones agrícolas cercanas al mar. Al lado de la pequeña Ermita Virgen de la Caridad da comienzo uno de los senderos más antiguos y hermosos de la isla, el Camino de Jinama que con más de 1.000m de desnivel desciende a través del Parque Rural de Frontera, un conjunto arbóreo que genera una agradable sombra húmeda puesto que esta zona es norte recibiendo los vientos alisios frecuentes.

Ermita N. Sra. de Candelaria


Comienzo el inclinado descenso por las verdes laderas e inclinadas paredes volcánicas al comienzo, no puedo contemplar el panorama abajo puesto que espesas nieblas cubren todo el contorno de El Golfo. Decidido abordo el descenso que ha de ser muy cuidadoso puesto que el firme de piedra no es liso sino que hay separación entre las piedras y hay que tener cuidado con una torcedura peligrosa o resbalón y culo al suelo, el bastón será elemento imprescindible, siempre recordaré este camino puesto que lo incluyo entre los más bellos senderos que he disfrutado. Se contornea entre las paredes de basalto y luego entre el espeso bosque, poco a poco pierdo altura pero se me hace interminable, ya muy abajo destaca la Ermita de Nª Sra. de la Candelaria en la cúspide de un cono volcánico, Frontera se ubica detrás precisamente de este monte.
A las 19h30m, algo cansado entro en Frontera, me dirijo al Hotel Ida Inés (Telef. +34 922 559 445) donde he reservado habitación, como decía antes, comienza a lloviznar. Me recibe Ida Inés con mucha amabilidad, a su padre Amos los conoceré mañana a la hora del desayuno, este hotel con encanto esta muy bien decorado y muy cómodo además de excelentemente atendido, un verdadero hallazgo.
Datos del GPS: Distancia recorrida 25,4k. Tiempo en movimiento 5h51m. Tiempo detenido 36m. Tiempo total empleado 6h27m. Media en movimiento 4,3 k/h. Media total 3,9 k/h. Ascenso acumulado 1.339m. Descenso acumulado 1.090m.

PERFIL DE LA JORNADA