14 MARANCHÓN – MEDINACELI 31,7k

Día 23-10-2014. Lourdes me tiene preparado un completo desayuno y una vez finalizado, a las 9 en punto, abandono Maranchón abrigado hasta las cejas, el viento del norte sopla con fuerza así que hasta media mañana, mientras siga por la alta paramera a mas de 1.300m de altura, ese aire frío me dará de cara con lo que caminaré con más brío para entrar en calor.

Parameras de Maranchón


Paso al lado de la Ermita de la Virgen de los Olmos para tomar un sendero poco evidente en ascenso entre aulagas, enebros, espinos y sabinas pasando al lado de los rugientes aerogeneradores que mueven las aspas como condenados. Llego a la zona más alta de la paramera al lado del punto Cruz de Hierro a 1.365m de altura, esta zona es divisoria de cuencas, ahora entraré en la del Río Ebro. Desde aquí tengo una amplísima panorámica alrededor en cientos de kilómetros pues la mañana está clarísima, veo hacia el norte el perfil conocido del Moncayo y las sierras del norte de Guadalajara, bonitas vistas.
Una serie de pistas de servicio de los distintos parques eólicos recientemente construidas, no figuran en los mapas topográficos, que el GR160 aprovecha en algún tramo. En un punto de la paramera abandono Guadalajara penetrando en Soria, iniciando el suave descenso por la hondonada que conforma el nacimiento del Río Blanco, la zona está cubierta por una espesa vegetación de rebollos y algún ejemplar enorme de sabina.

Layna-Viejos olmos


Ahora el sol templa el ambiente ascendiendo la temperatura y obligándome a abandonar la ropa de abrigo, doy vista al amplio, al fondo el pueblo de Layna, desciendo hacia el fondo del plano pasando al lado de unas naves ganaderas llenas de ovejas que balan con fuerza. Tomo contacto con una carretera que circula entre tierras de labor muy fértiles y choperas a la vera del cauce del Río Blanco.

Valle del Río Arbejuelo


Durante la jornada veré a tres paisanos cesta en ristre a la búsqueda de las ricas setas, supongo serán abundantes pus ha llovido mucho y ahora el sol calentando es el tiempo ideal para su crecimiento. Sigo por la carretera pasando al lado de una pradera donde pasta un rebaño de vacas, las primeras que veo desde hace días por el GR160. Antes de entrar en el pueblo de Layna hay muchos muros de piedra para retener las tierras cultivables, eras y zonas de pasto así como paredes de piedra también para proteger pequeñas fincas agrícolas.
Layna tiene una bonita entrada, una fuente con tres caños de abundante chorro, un lavadero público restaurado y una serie de viejísimos olmos, luego el pueblo en la ladera de una loma, nada especial tiene para comentar, no encuentro ninguna persona con quien charlar un rato. Abandono Layna por la parte alta desde donde tengo una bonita panorámica de todo el Valle del Río Blanco. Antes de entrar en Layna, un indicador del GR86 marca la ruta hacia el pueblo de Judes.

Rocas de los Tolmos-Arbejuelo


Desciendo por un sendero nuevamente hacia el Valle del Río Blanco donde me dirigen las balizas del GR160 hasta un punto donde una acequia ha inundado el sendero cubierto de vegetación, he de tirar campo a través hacia un camino que me enlazará nuevamente con el GR160, este sigue precisamente este mismo camino. Sigo el camino hasta encontrarme con dos senderistas que vienen de frente, el enrolle está asegurado, se trata de Paco Sancho Asensio y Abraham, de Illueca, están recorriendo el GR86 a tramos, hoy han comenzado en Medinaceli, en buena charla sobre nuestras aficiones comunes nos entretenemos un buen rato, la verdad es que ya necesitaba hablar con alguien.

Camino del Pradejón


De nuevo en solitario sigo hacia el pueblo de Urex de Medinaceli que veo al fondo casi bajo un enorme viaducto del AVE, son las 12h40m, hora propicia para hacer una parada al confortable sol y comer otro par de tortas de aceite que compré ayer en Anguita además de algo de fruta que amablemente me dio Lourdes esta mañana, todo me sabe delicioso.
Sigo la ruta cruzando la pequeña aldea de Urex de Medinaceli donde fluyen varios manantiales kársticos con aguas transparentes, tomo una carretera al lado de la vía del AVE hasta enlazar con la carretera Maranchón-Medinaceli cruzando las vías de ferrocarril por un subterráneo y abandonar la carretera por un camino terrero que me lleva hasta una paramera elevada llamada El Mojonazo (vértice a 1.240m), este punto es el inicio del Valle del Río Arbejuelo desde donde tengo una primera perspectiva, a lo lejos, de Medinaceli ubicado en un elevado cerro.
El bonito valle, visto desde aquí arriba, con sus choperas y campos de labor, además de dos peñones calizos que sobresalen gemelos de la ladera del monte. Comienzo el descenso hacia la base del amplio valle por el camino de tierra hasta los juncales y choperas al lado del cauce del arroyo, van destacando cada vez más, a medida que me acerco, los dos farallones pétreos al lado de la aldea de Arbejuelo que tiene su hueco en la historia del Cantar de Mio Cid además de una gran sima en los alrededores. Campos muy fértiles en la vega conforman grandes arboledas y frutales, un manzano derrengado por el peso de los maduros frutos me ofrece ricas manzanas que dispongo a discreción.
Una calzada que distingo en la ladera del monte llama mi atención, los muretes de piedra bien colocada me indica su origen antiguo, está algo alejada en lo alto pues no me hubiera importado acercarme a comprobar su base. Salgo de Arbejuelo contemplando las Rocas de los Tolmos desde su base, impresionantes, al seguir por un camino descubro un rebaño de ovejas detenidas y arrebujadas, el pastor tumbado boca abajo en la hierba durmiendo la siesta, está justo en mi camino, me acerco, toso y se despierta, le pregunto si escuchaba crecer la hierba, se ríe, no estoy muy seguro de que me haya entendido el magrebí.

Calzada de ascenso a Medinaceli


Tomo el llamado Camino del Pradejón sobre cuya mullida hierba camino con verdadero placer, sobre todo ahora que veo como se acerca mi destino de hoy, Medinaceli, en lo alto. Cruzo Salinas de Medinaceli que como su nombre indica, una gran laguna salada hubo aquí cerca, aún hoy unas pequeñas balsas parecen indicar su origen. Sigo por el camino hasta desembocar en las obras de ampliación de la autovía Madrid-Zaragoza donde grandes camiones cargan y descargan materiales con gran ruido y polvo, paso lo más rápido que puedo del infierno hasta llegar a la Estación de Medinaceli, sigo por la carretera donde hay aparcados grandes camiones para tomar la carretera en ascenso a Medinaceli.

Arco romano de Medinaceli


En la primera curva de la carretera de subida, abandono el asfalto siguiendo la antigua calzada que me sube de forma directa, entre bonitas arboledas, hasta el collado donde está la Ermita del Humilladero, sigo rodeando las murallas y el castillo hasta arribar a la Puerta Árabe de Medinaceli, entro por sus estrechas callejuelas, bonitas casas y palacetes hasta el Arco Romano que vuelvo a contemplar extasiado al igual que el amplio panorama que me ofrece esta elevada atalaya, especialmente el Valle del Río Arbejuelo por donde he venido. He llegado a las 16h30m, me hospedo en el Hotel Bavieca (www.bavieca.net) donde me recibe Mario, aquí he reservado habitación, a continuación las tareas cotidianas, después, como aún hay suficiente luz solar, aprovecho para darme un agradable paseo alrededor de Medinaceli, su castillo, murallas y el resto de este bello lugar que por cuarta vez visito.

Panorámica desde Medinaceli


Datos del GPS: Distancia recorrida 31,7k. Tiempo en movimiento 6h40m. Tiempo detenido 1h. Tiempo total empleado 7h40m. Media en movimiento 4,8 k/h. Media total 4,2 k/h. Ascenso acumulado 508m. Descenso acumulado 466m.

PERFIL DE LA JORNADA