SILES – PRADO MAGUILLO 32k.

Día 4-11-2013. Cómodamente sentado en el confortable bus de SAMAR, contemplo las interminables llanuras manchegas con breve parada en Manzanares y Valdepeñas. Todo está cubierto por las nubes pero sin llover, eso sí, al llegar a Siles a las 19h y descender del bus, la temperatura debe ser de 10 grados con un viento frío, veremos que ocurre mañana puesto que los pronósticos meteorológicos no son muy positivos.

Siles y Río de los Molinos


Pasado Valdepeñas en dirección sur, hemos cruzado una serie de pueblos manchegos y una bonita zona donde hay un embalse aún siendo una planicie donde aves acuáticas nadan a placer. Superado el pueblo de Juan Abad se divisan las primeras elevaciones del terreno, luego cruzamos Villamanrique ubicado en una loma, Puebla del Príncipe y Terrinches ya en las cercanías de Montiel.
En varios cruces de pistas he visto carteles descriptivos de la Ruta Senderista Camino de Aníbal y algo más adelante entramos en la cuenca del Río Guadalmena, hasta llegar al cauce del Río Guadalimar en Puente de Génave para entrar luego en el Parque Natural Sierras de Cazorla y Segura las Villas.
Sobre las 18h30m se oscurecen los alrededores destacando el bonito pueblo de Segura de la Sierra ubicado en la ladera de un elevado cono en cuya cima se halla un esbelto castillo. En próximos días lo veré desde varios puntos y el jueves entraré en el mismo, de momento he recibido una pincelada preciosa del pueblo.

La Acebeda


En el pueblo de Orcera se apean los últimos viajeros dejándome solo al lado del conductor a quien voy haciendo preguntas sobre estos bonitos parajes hasta llegar a Siles. Aquí he reservado hospedaje en el Hotel Restaurante Cruz (www.hotelcruz.com) donde soy recibido por Santiago quién es especialmente agradable y ameno, me enseña el hotel con todo detalle, me habla de los lugares que deberé visitar en mi periplo, etc. etc.

Peña del Agujero


Santiago incluso me pone un vídeo donde explica, tanto él como su familia, los platos típicos de la zona que acostumbra a servir en su restaurante además de algunas panorámicas de los lugares cercanos a Siles que son de especial interés.
Así pues ya alojado, una sobria cena y a descansar que mañana será una jornada muy emocionante, tengo todo preparado para iniciar la ruta al amanecer.

Día 5-11-2013. La mañana se presenta lluviosa tal y como estaba previsto, una ligera llovizna que poco a poco va calando, por tanto bien protegido contra la humedad, después de desayunar y despedirme de Santiago que ha madrugado algo más de lo habitual para atenderme, a las 8 en punto cruzo Siles para tomar un camino que me desciende a la vera del Río de los Molinos. Cuando voy cruzando un olivar, un bonito perro huskie me sale al paso muy zalamero y juguetón, no me deja en paz y no se aleja de mí en ningún momento.

Prado Espinosilla


Junto a mi nuevo amigo Siles, así he bautizado al bonito perro, tomo la carretera que junto al río y sus bonitas choperas de otoñal colorido, llego a la Zona de Recreo Peña del Olivar donde da comienzo o termina el GR247 Bosques del Sur. Varios carteles informan sobre los distintos itinerarios senderistas aparte del GR247 que permiten realizar cortos recorridos con las señales blanca y amarilla de PR.
Bajo la ligera llovizna comienzo el ascenso a las Peñas del Olivar por senda muy bien señalizada que en lazadas va ganando la inclinada ladera con buenas perspectivas de Siles y sus alrededores, lástima que no haya sido un día soleado para contemplar a placer el bonito valle del Río de los Molinos y las montañas que rodean Siles, especialmente el Cambrón (1.550m), una elevación caliza rodeada de escarpadas paredes con una plataforma plana superior que destaca desde lejos y que pude contemplar realizando el GR66 por Góntar y el Macizo del Mentiras, pero las nieblas y la lluvia impiden la visión.

Cortijo de la Cañada del Saucar


Superadas las Peñas del Olivar la senda bordea el Cerro Bucentaina (1.416m) por su ladera oriental penetrando en los canales, unas paredes calizas donde la senda serpentea para superar los paredones siguiendo a través del espeso bosque de pinos. En las laderas húmedas un bosque de madroños ha dejado el suelo lleno de los ricos frutos muy maduros, mi compañero Siles camina y corretea delante como si disfrutara más que yo de la excursión, me pregunto hasta donde me acompañará pues con tanta distancia y muchos cruces dudo que pudiera volver atrás.
Sigue la senda cruzando bosques de pino laricio hasta arribar a una zona llamada Las Acebeas en las laderas del Calar de Navalperal (1.618m) donde un espeso bosque de acebos, ahora con sus frutos rojos, contiene grandes ejemplares, ésta parte es muy húmeda, por eso el enorme bosque de acebos que probablemente sea uno de los más grandes de la península y curiosamente tan al sur.
La senda me lleva hasta el Cortijo de las Acebeas, una parte abandonada, aquí hago una breve parada en el porche de la casa, grandes árboles adornan los jardines en lo que debió ser un importante cortijo. Algo más adelante llego a un cruce de pistas con indicadores a varios pueblos, es la Era del Fustal, donde se ha construido recientemente un refugio, son ahora las 11h30m. Entro en el refugio que tiene literas y mesa para comer, podrían pernoctar 8 personas. He dejado al perro fuera y cuando salgo ha desaparecido, seguramente ha seguido una de las pistas, ojalá llegue de nuevo a su casa en Siles.

Prado Maguillo


Los arroyos que bajan del Calar de Navalperal regando Las Acebeas van a conformar, más abajo, el nacimiento del Río Tus afluente del Río Segura, su curso es muy interesante de recorrer y donde se ubica el Aserradero de Tus, más abajo ha horadado una bonita y espectacular garganta que pude contemplar realizando el GR66.
Sigo ahora en solitario por un camino de tierra que me lleva, sobre los 1.300m de altura, por zonas algo planas, son las 13h y parece que quiere clarear, hace mucho rato dejó de llover. Desciendo hacia un vallecito formado por el Arroyo de la Balasna debajo de unas imponentes formaciones calizas muy oscuras, es el Calar de Nava del Espino que dejo a la izquierda, a la derecha sale un camino de ascenso al Cerro del Espino (1.720m), en la ladera de poniente de este cerro nace el Río Madera, el camino pasa ahora por varios cortijos ruinosos.
Continúo por la pista terrera pasando por la Fuente del Tejo y el Cortijo de la Viuda, más adelante arribo al Collado de Góntar (1.575m), lástima no poder contemplar las magníficas panorámicas que desde este elevado punto de deben divisar, las nieblas me lo impiden. Inicio el largo descenso por laderas desnudas que debieron ser arrasadas por algún incendio hace años pues aún se pueden ver los negros troncos de pinos apilados.
No he visto a ningún ser humano salvo tres o cuatro todoterrenos y un coche forestal. Paso por la puerta del Cortijo de la Cañada del Saucar donde un paisano atiende el ganado, desde aquí parte un camino de ascenso al Calar de Cobos (1.796m) en cuya cumbre hay una caseta y que mañana veré con mayor detalle.
Continúo por el valle que conforma el Arroyo de la Cañada hasta arribas a Prado Maguillo, una pequeña aldea donde Roque Latorre (Telef. 687274893) ha restaurado casa convertida en Casa de Aldea muy cómoda y agradable. Roque ha tenido la consideración de venir desde Úbeda a atenderme y darme así alojamiento. Muchas gracias Roque.
He llegado a Prado Maguillo a las 16h30m y se halla a 1.360m de altura. A la cena se suma Jesús quién también tiene una casita en la aldea, la sobremesa se alarga en amena y agradable charla disfrutada con una botella de vino del Priorat. Gracias amigos.
Datos del GPS: Distancia recorrida 32k. Tiempo en movimiento 7h38m. Tiempo detenido 53m. Tiempo total empleado 8h31m. Media en movimiento 4,20 k/h. Media total 3,8 k/h. Altura máxima 1.624m.

PERFIL DE LA JORNADA