SANTUARI PUIGCERVER - TIVISSA Kmts. 46

Día 18-4-00. Hacia las 6,30 de la mañana comienzo a recoger el material, continúa el fuerte viento y sobre el mar comienza a amanecer. A las 7 estoy preparado para la durísima jornada que me espera, en primer lugar el descenso al Coll de la Teixeta a través de un camino por todo el cordal, la espléndida luna sigue luciendo con intensidad, parece que está prendida en el cielo, como colgada de adorno.

l´Argentera

Enfrente, a lo lejos, hacia el sur en mi dirección y sobre las montañas destaca un gran parque eólico con gigantescos molinos de viento, modernos y agresivos gigantes que diría Cervantes. Cuando ya estoy a un paso de descender al Coll, por donde pasa una importante carretera, me encuentro con que la senda está cortada por un gran corrimiento de tierras que ha provocado una enorme zanja muy profunda que me impide continuar, la zanja es alargada y de casi 100 mts. por tanto he de dar un gran rodeo a través de matorrales y localizar el sitio adecuado para terminar el descenso, serán unos 70 mts. de desnivel muy inclinado. En el lado oeste del Coll están trabajando con máquinas orugas para construir un túnel y así evitar las curvas de ascenso al puerto. El GR continúa por la ladera este de los contrafuertes de la Serra del Pradell, la roca, en la parte alta es calcárea pero la más baja es de un color rojizo como de rodeno.

Serra de Pradell

Después de un largo trecho por un buen y amplio camino, llego al pueblecito de l´Argentera, con muchas ganas de tomarme un buen café, cosa que no es posible, el único bar está cerrado. Sobresale enfrente, en un cerro, el Castell d´Escornalbou, yo comienzo el ascenso a la cumbre de la Serra de l´Argentera, es el lugar donde se ubica el parque eólico, recientemente instalado, con el fuerte viento hacen un ruido atronador a medida que me acerco a ellos, debe haber lo menos 50 y aunque es verdad que distorsionan el paisaje, por su blancura y dimensiones, al menos la energía que producen es natural y no contaminante. Hacia las 10,30 desciendo al Coll Roig y comienzo la bajada al pueblo de Colldejou donde llego hacia las 12 del mediodía.

Serra de Pradell - Panorámica nordeste

He rodeado la Mola de Colldejou en cuya cima he podido ver una especie de construcción redonda, he leído que fue observatorio militar en otras épocas, la cumbre está a 900 mts. de altura, la verdad es que otra alternativa hubiera sido ascenderla y bajar por su parte sur a empalmar con el GR en el Coll del Guix, de esto me di cuenta cuando ya no tenía remedio.

Serra de Llabería - Panorámica norte

En Colldejou hay un bar muy nuevo, con permiso del encargado y aunque es algo temprano, como de mochila y a las 12,30 continúo la marcha para realizar el fuerte ascenso al Coll del Guix que con el calor que hace me cuesta unos sudores.

Desde el Coll tengo de nuevo la panorámica del Priorat por mi derecha y la zona de costa por la izquierda, ahora tomo un hermoso camino empedrado y muy bien conservado que asciende, por la ladera norte, a lo Portell, una especie de paso en la Serra de Llabería. Es un verdadero placer caminar por la senda, a la sombra de un hermoso bosque, a veces me paro a mirar hacia atrás y ver la Mola de Colldejou y más a lo lejos la Serra de Montsant. En lo Portell dejo la mochila para dirijirme a la zona más alta y así tener una buena panorámica, estoy a unos 900 mts. de altura, puedo contemplar un amplísimo radio.

Serra de Llabería - Panorámica al sur

Inicio el descenso hacia la aldea de Llabería, toda esta zona ha debido sufrir, hace algunos años, un gran incendio, hay muchos troncos de pinos calcinados. Cruzo Llabería sin ver a nadie, las casas tienen aspecto de haber sido restauradas recientemente, incluso la iglesia está en ese proceso actualmente. Comienzo el descenso al Barranc del Tortó a través de otro bonito sendero que une Llabería con Capçanes, otro pueblecito que veré muy cerca.

Es esta una zona muy salvaje, picos escarpados y mucha vegetación, impresiona desde arriba pensar que he de descender más de 300 mts. hasta la base de los barrancos entre cortados y la abigarrada vegetación. El camino está bien trazado, me lleva en zig-zag hasta el lecho del Tortó y más adelante se junta al Portadeix para conformar el Barranc de la Vall y continuar su trazado hasta Capçanes.

Serra de Llabería - El Priorat

Por todo el lecho, al ser muy húmedo, la arboleda es compacta, no puedo por menos de imaginarme un incendio en una zona sin salida posible, aterrador. Una vez que salgo de los estrechamientos llego a zonas con sembrados, como siempre olivos, almendra y ahora especialmente vides, en este caso bien cuidadas. Cuando doy vista a Capçanes, a unos dos kmts. de distancia, la senda gira de forma radical a la izquierda para iniciar el ascenso al Coll de Montalt, otra subida superinclinada que disminuye mis mermadas fuerzas, el Coll está a 600 mts. de altura, por tanto he de ganar 350 mts. en corta distancia. Por la izquierda aparecen unas impresionantes paredes, son la cara norte del Montalt, cuya cumbre se halla a 750 mts. Del otro lado del Coll hay gran cantidad de troncos de pino quemados, incluso muchos de ellos interrumpiendo el camino y como siempre muchas masías abandonadas y las zonas de cultivos aterrazados lo mismo, abandonados hace muchos años.

Capçanes

Desciendo largo trecho por el barranco a través de una pista que se dirige al pueblo de la Serra d´Almos, pero el GR gira a la izquierda por otro barranco, ahora en ascenso, se oscurece de forma tormentosa y caen algunas gotas, no llegará a mayores pero agradezco la humedad. Nuevamente asciendo a otro collado, este a unos 500 mts. de altura y al lado del ruinoso Maset de Moles donde hago una breve parada a descansar, ya me queda poco para llegar a Tivissa, son las 6 de la tarde. Cruzo varias explotaciones de avellanos y llego a un alto desde donde veo Tivissa al fondo y en la falda de grandes paredes, también puedo ver el Valle del Ebro, todo muy verde y rodeado de montes.

Tivissa

Tivissa se halla protegida por las murallas de la parte oeste de la Serra de la Creu, es un conjunto urbano muy compacto y con orígenes romanos. Después de un largo descenso llego a Tivissa a las 7,15, me hospedo en un bar-restaurante que hay a la entrada, esta noche descansaré profundamente. La dureza de la jornada queda patente al calcular el total de metros de desnivel, tanto en ascenso como en descenso y solamente tomando en cuenta los más importantes, han sido más de 3.000 mts