Día 6-07-2023. Al final de esta jornada en Pontesampaio abandonaré el Camino Portugués para continuar mi ruta por la Costa das Rías Baixas siguiendo hasta Cangas do Morrazo mañana viernes por la Ría de Vigo. A las 7h30m, con un frescor mañanero delicioso, sigo el balizado Camino Portugués cruzando las interminables avenidas de la Ciudad de Vigo hacia el nordeste, algunos peregrinos también han madrugado, unos me darán alcance y a otros los superaré con mi acostumbrado ritmo a medio gas.

Monte da Guía

Sobre las 8h15m abandono la carretera PO-323 por la derecha a través de una muy inclinada rampa hacia el bosque en lo alto, a medida que tomo altura sobresale el Monte la Guía, la Ría de Vigo, las bateas en el agua y el Monte do Morrazo cubierto de antenas, también el Puente de Rande a lo lejos, luego pasaré bastante cerca en el estrechamiento de la ría y lo contemplaré desde lo alto si el bosque me lo permite. Las inclinadas rampas me depositan en un camino a nivel, sobre los 180m de altura, que en varios kilómetros irá bordeando la ría. Una niña, en el jardín de su casa, vende agua a los peregrinos además de alguna otra cosilla, ha colocado varios carteles con sus ofertas.

Bahía de Vigo

Muchos ciclistas van o vienen por el camino, también deportistas y paseantes mañaneros, puesto que transcurre por la sombra del bosque con temperatura muy agradable, es una delicia circular por aquí, ha sido un verdadero acierto por parte de quienes han trazado el itinerario puesto que por la zona baja, al lado de la costa, hay infinidad de industrias, almacenes, vía férrea, carretera, autovía, etc. que sería un tormento caminar por allí abajo. Sin embargo por aquí en lo alto se ven panoramas en largas distancias de toda la Ría de Vigo y los montes que la circundan, incluso se pasa al lado de una cascada que vierte agua con cierta fuerza en un entorno húmedo y en penumbra.

Roca adornada

Me encuentro con un puesto donde se venden bastones de madera muy bien elaborados artesanalmente y tallados a mano por Venancio, las tallas de los cabezales con imágenes de animales realizados con mucha paciencia, pide la voluntad. Me enrollo con Venancio un buen rato contándome su vida, tiene ganas de charla y muy interesado en mostrar su artesano trabajo. Siento no poder comprarle nada puesto que en el aeropuerto al pasar el control de seguridad es todo un tormento y son excesivamente severos con las normas, especialmente con los bastones.

Por el Alto da Encarnación

Doy vista, justo encima del bonito Puente de Rande desde donde puedo hacer algunas fotos, ahora comienzo el inclinado descenso a Redondela, un grupo de senderistas de Jaén, que han venido en bus y no llevan peso a la espalda, me alcanzan en pleno jolgorio, hablan de que tienen apalabrada una mariscada para todos en un restaurante, dicen llegarán a Pontevedra, a pesar de dejarlos muy atrás aún puedo escuchar sus gritos, diablos como chillan.

Camino de Redondela

A las 11h llego al centro de Redondela para salir por una pista estrecha con circulación de vehículos, he de ir muy precavido. Luego por caminos entre bosques donde me adelanta un grupo numeroso de ciclistas, a la sombra y soplando la fresca brisa se camina relajadamente. Al lado del Camino una joven, con una mesa de recuerdos del camino, sella la credencial de peregrino, con ella me enrollo otro rato, la pobre está algo aburrida. He de subir una rampa muy inclinada, son las 12h y el sol aprieta en la subida, luego bajo la sombra de un árbol hago una parada a hidratarme y recuperar el resuello.

Puente de Rande

A continuación la rampa es en inclinado descenso que desemboca en la CN-550 donde rugen los camiones, es una corta distancia donde apresuro la marcha para salir del infierno. A las 13h entro en Arcade, le pregunto algo a un paisano que resulta llamarse Emilio, de la tribu de los ciclistas así que en buen rollo nos pasamos un buen rato, me acompaña hasta el hermoso puente medieval Pontesampaio dándome toda clase de explicaciones sobre mi ruta de mañana hacia Cangas puesto que conoce perfectamente todo el entorno.

Puente de Rande y Bahía de Vigo

Después de las fotos de rigor, cruzo el puente entrando en la parte vieja del pueblecito de Sampaio, un cartel indica un Roteiro (Senda) para conocer el pueblo y algunos sitios de interés al lado del río como una pequeña isla con bonitas murallas.

Pontesampaio

El Hotel San Luis, donde tengo reservado alojamiento está muy cerca así que como son las 14h15m puedo hasta comer en el propio hotel, está en la carretera N-550, justo enfrente donde nace el camino que he de seguir a Las Salinas que será el comienzo de mi ruta mañana temprano.

Estuario del Río Verdugo

Datos del GPS: Distancia recorrida 27,5k. Tiempo en movimiento 5h45m. Tiempo detenido 60m. Tiempo total empleado 6h45m. Media en movimiento 4,7 k/h. Media total 4 k/h. Ascenso acumulado 365m. Descenso acumulado 386m.

PERFIL DE LA JORNADA