11 CIRCULAR AL MONTE DO PINDO Y A MOA 14,3K

Día 6-10-2023. Hoy voy a cumplir una vieja promesa mucho tiempo esperada, el ascenso al Monte do Pindo y a la Peña da Moa, el Olimpo Celta como también se le conoce, una cima muy venerada en toda Galicia de la que tanto he oído hablar, para ello me pego un madrugón con el fin de realizar el ascenso a los 635m de altura bien temprano puesto que las temperaturas de estos días llegan a alcanzar los 30 grados por aquí y deseo subir con el fresco mañanero de los 13 grados que hace hoy a las 8 de la mañana cuando me apeo del bus que me traslada desde Cee hasta O Pindo, he de hacer una relajada espera a que amanezca puesto que el camino al inicio, tal como comprobé ayer mismo, penetra en una zona arbolada y estrecho además con piedras así que hasta las 8h20m no doy comienzo a la ruta.

Amanece en el ascenso al Monte do Pindo


El sendero está muy pisado y limpio, está franqueado por una pared de piedra, balizado con las señales blanca y amarilla de PR además de unos mojones de madera que orientan al senderista en caso de mala visibilidad, cosa muy frecuente en la zona, mismamente ayer el monte estuvo toda la mañana cubierto por espesas nieblas húmedas que dejaron mojadas las rocas, suelo y los arbustos como si de lluvia se tratara, por tanto ayer no hubiera podido hacer la ruta puesto que la observación de los panoramas hubiera sido imposible hasta la mediodía. El sendero se inclina con fuerza rápidamente lo que me obliga a realizar mayor esfuerzo, incluso varios troncos de pinos en medio me obligan a superarlos por debajo casi como a gatas. Varios arroyos bajan con algo de caudal que se escuchan en la tranquilidad de la mañana, una tubería bajo el piso y rocas del sendero supongo llevará agua a algún lugar abajo.

Laberinto granítico


Sobre el nivel de los 250m de altura un sendero por la izquierda, con una baliza azul, sigue en descenso sigue hacia O Porto de Quilmas y las ruinas de un castro antiguo. Desde aquí tengo buenas perspectivas de la zona de Carnota y su larguísimo arenal que ayer crucé de lado a lado además de la Bahía de Corcubión, Cee y más al fondo Fisterra, de vez en cuando vuelvo la vista atrás para ver como va apareciendo todo en el horizonte pues la atmósfera está limpia y el cielo azul deslumbrante. Me parece estar en medio de la Pedriza de Manzanares en Madrid que frecuento muy a menudo, es el laberinto granítico por excelencia igual que este entorno que por primera vez visito. Algo más adelante aparece un gigantesco laberinto de moles de granito como desprendidas durante un movimiento telúrico, el sendero va salvando esos tremendos inconvenientes dando giros por zonas menos agresivas, aparecen torres y centinelas de granito como talladas por un artista.

Senda entre rocas


Sobre los 500m de altura el sendero llega a un collado con el suelo cubierto de hierba muy verde que desciende hacia un plano más bajo como una especie de suave y agradable valle por donde camino de forma muy placentera, el sol ya me da de plano iluminando todo alrededor puesto que he subido por la umbría hasta aquí. Puedo contemplar la cima de Moa donde destaca un vértice geodésico en su cumbre, ahora el sendero sigue un curso bastante suave y agradable entrando por un corredor ya iniciando el giro alrededor de la gran Peña de Moa. Llego a un collado donde desemboca un sendero que asciende por el lado nordeste siendo el que seguiré en el descenso para realizar un curso casi circular por la aldea de O Fieiro.

Figuras de granito


Y ahora comienzo el ascenso final de unos 30-40m a través de los inclinados lanchares graníticos, este ascenso supongo asustará a los no iniciados en estas actividades, con vértigo o miedo en los descensos muy inclinados por este tipo de lanchares, por supuesto en caso de estar húmedos sería una temeridad su ascenso. Subo con mucha decisión a grandes zancadas cruzando las numerosas marmitas cubiertas de agua para llegar al punto más elevado a 635m que es lo que marca mi GPS, son las 10h45m.

Cumbre de A Moa


Describir el inmenso panorama que desde aquí contemplo en un radio, diría que de cerca de 100k, sería demasiado amplio, mi atención se fija especialmente en la costa por el bonito colorido que ofrece en contraste con el verdor de los bosques alrededor, Fisterra, Bahía de Corcubión, las playas que ayer recorrí, especialmente la larguísima de Carnota, además de los innumerables montes que en la distancia se perfilan con nitidez, naturalmente muchos de ellos cercanos a las costas los he recorrido por sus bases, aquí bien cerca el Embalse de Santa Uxía que llena el Río Xallas que siempre lleva mucho caudal como bien comprobé al cruzarlo realizando el Camino de Santiago a Fisterra hace algunos años.

Al fondo Fisterra


Muchas cuevas y oquedades en todas estas laderas graníticas donde se refugiaron muchos veteranos gallegos perseguidos por las fuerzas durante la guerra intentando salvar la vida en aquellos peligrosos años y también posteriores, cuevas bien conocidas y nombradas que ahora se pueden visitar guiados por gente experta de la zona. Bien pues ahora tomo el sendero de descenso que comparado con el de ascenso nada tiene que ver, este es mucho más suave de inclinación, menos pedregoso y mucho más fácil su ascenso y descenso, me lo voy tomando con mucha tranquilidad observando lo que me ofrece la depresión del Río Xallas y los montes que rodean Fervenza, no obstante he de bajar con precaución.

Bahía de Corcubión desde A Moa


Me cruzo con una pareja de jóvenes extranjeros que me hacen algunas preguntas del itinerario, luego algo más adelante otras tres personas también ascienden con mucha tranquilidad, la posibilidad de subir en vehículo hasta el pueblo de O Fieiro casi 300m de altura permite reducir a la mitad el duro ascenso por este lado. En un punto del sendero con barro resbalo y doy con el culo en el suelo embarrado así que quedo marcado mi trasero, sin consecuencia. Mas abajo el rocío ha cubierto la zona herbosa entre los pinos donde el sol brilla con fuerza, ahora el descenso ya es muy suave y puedo bajar con cierto brío hasta llegar a O Fieiro a las 12h, una máquina trabaja para ampliar el especio de aparcamiento de coches.

O Ézaro, Cee y Corcubión


Sigo ahora la pista asfaltada hacia la Presa de Santa Uxía sobre el Río Xallas que aunque no está llena a rebosar, se aprecia que no hay falta de agua por ahora, el rebosadero suelta agua sin demasiada fuerza que es la que baja a la Cascada de Ézaro a través de una estrecha e inclinada garganta. Sigo la carretera que asciende hasta una desviación hacia el Mirador de Ézaro donde llego a las 12h40m, desde aquí también las panorámicas son muy bonitas y amplias, ya cerradas a una zona más estrecha pero más cercana, abajo el paseo hacia la cascada y aparcamiento además del Ponte do Ézaro y la Enseada también de Ézaro.
Sigo el descenso por la pista hasta un punto donde se divide en dos ramales, uno por el que ahora pueden bajar los coches cruzando las aldeas hasta la carretera y el otro ramal cerrado al tráfico puesto que están acondicionando un arcén para peatones ahora en obras, yo naturalmente puedo bajar sin problema alguno hasta la zona al lado del ascenso a la cascada y aparcamiento, además de puerto deportivo para llegar a la carretera de entrada a O Ézaro cuando el reloj marca las13h20m. Tomo un taxi, puesto que el bus no llegará hasta pasadas las 15h, para Cee donde tengo parte de la mochila en el Hotel Larry donde me he alojado.
Datos del GPS: Distancia recorrida 14,3k. Tiempo en movimiento 4h. Tiempo detenido 1h. Tiempo total empleado 5h. Media en movimiento 3,6 k/h. Media total 2,9 k/h. Ascenso acumulado 665m. Descenso acumulado 671m.

PERFIL DE LA JORNADA